Buenas tardes Nuria:

Antes que nada, desear que hayas tenido una buena entrada de año.

El haberme retrasado en escribirte pasa necesariamente por la condición de abuelos en la que estamos afortunadamente ya inmersos, habiendo disfrutado de nuestros hijos y nietos desde que volvimos prácticamente de Argentina hasta hace unos días.

 

Decirte que hemos hecho un viaje maravilloso donde los contrastes tan fuertes existentes entre los tres lugares nos ha impresionado.

 

En cuanto al viaje en sí mismo (organización, seriedad, calidad, puntualidad y programación) nos sentimos muy satisfechos contigo como persona de contacto de tu agencia de viajes y muy orgullosos de ti como persona. Tu calidad humana y profesional te delata. La preocupación constante de las personas que, en tu nombre, han querido saber si en todo momento estábamos bien atendidos, cómodos y pasándolo bien es un sello indeleble que marca distancias sin ánimo de comparaciones odiosas.

 

 

Tanto es así que un gran amigo mío quiere hacer un viaje de placer a Argentina, con su mujer, y aunque dice que lo tiene ya programado me he permitido el atrevimiento de darle tu nombre para que se acerque y pregunte por ti. Vive en Barcelona. Curiosamente también se llama Xavier.

Te deseamos toda la suerte del mundo en este año 2018 que acaba de empezar para todo menos para tu trabajo ya que has demostrado, por ti misma y en representación de tu agencia, que cuando las cosas se hacen bien el factor suerte queda relegado a último término.

Muchas gracias por todo. Encantados de vuestro servicio y de vuestras atenciones.

Un beso a ti y saludos a todos los componentes de tu agencia.

 

Francisca R. y Javier G.